Convocados por el Comité de Desarrollo Campesino (Codeca) y la Coordinadora Nacional de organizaciones Campesinos (Cnoc), los campesinos salieron desde los cuatro puntos cardinales y llegaron al centro histórico de la capital.
«Exigimos la renuncia de Jimmy Morales y su gabinete», «Jimmy Morales a los tribunales por corrupto y ladrón», «Renuncia de los 158 diputados ladrones», fueron las consignas de los campesinos en las afueras del Congreso.
Los «cobardes» asesinatos de los líderes campesinos son prueba de las «graves violaciones a los derechos humanos dirigidas por el Estado de Guatemala», asegura un pronunciamiento de las dos organizaciones.
Recordaron que a principios de mayo pasado durante una manifestación de locatarios del mercado de La Terminal, Morales la arremetió contra Codeca, la Procuraduría de Derechos Humanos y el Ministerio Público (MP) con un discurso de «odio y resentimiento».
«Exigimos la renuncia de Jimmy Morales y su gabinete por corrupto y asesino y la dimisión de los diputados vinculados en actos de corrupción e impunidad», expresa el texto.
Los campesinos pidieron a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) que investigue de oficio los asesinatos de los defensores de derechos humanos.
También exigieron al MP que capture a los responsables de esos crímenes.
Uno de los dirigentes de Codeca, Efraín Chávez, manifestó que el presidente Morales debe renunciar porque «no está haciendo nada por el pueblo».
Recordó que cuatro de sus líderes, entre los que mencionó a Luis Marroquín, de 47 años, han sido asesinados en las últimas semanas en diferentes regiones de Guatemala.
«Exigimos justicia. Luis Arturo Marroquín vive» decía una pancarta. Este líder fue asesinado en San Luis Jilotepeque, en el departamento oriental de Jalapa, y Codeca responsabiliza de su crimen al presidente Morales.
Otros tres miembros del Comité de Desarrollo del Altiplano (CCDA) también fueron asesinados a tiros por desconocidos en el plazo de un mes.
Hace dos días, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) en Guatemala manifestó su preocupación por esos asesinatos y pidió a las autoridades dar seguimiento a esos casos.
Un fuerte contingente de la Policía Nacional Civil (PNC) fue desplazado a los alrededores del Organismo Legislativo para garantizar la seguridad durante la protesta que no registró incidentes, pero sí complicó el tráfico de vehículos.
Durante la manifestación las organizaciones se solidarizaron con las familias que perdieron parientes, sus viviendas y pertenencias por la violenta erupción que registró el pasado 3 de junio el volcán de Fuego.
La actividad ha dejado hasta ahora 114 muertos, 54 heridos, 197 desaparecidos, 186 casas destruidas y 750 en riesgo, así como 1,7 millones de afectados.
EFE / MV
