Las personas de la tercera edad deben hacer “safaris” por las farmacias, hospitales, ambulatorios y CDI al momento de adquirir los medicamentos hipertensivos para cumplir con su tratamiento. La ausencia de los mismos se debe a que las droguerías tienen más de 15 días de retraso con los despachos, según informó la farmacéutico Laurie Gil.
“Venimos de unas vacaciones decembrinas y las droguerías, más los pocos laboratorios que quedan en el país, están apenas arrancando con sus labores. La escasez que ya había de medicamentos se unió con los días de vacaciones y por eso comenzó a fallar la llegada de medicamentos en general”, declaró Gil.
Por otra parte, las pocas cajas de hipertensivos que se pueden encontrar en una que otra farmacia tienen costos exorbitantes, imposibles de adquirir con la pensión que les pagan a las personas de la tercera edad. La caja de Losartán importado de 100 ml que trae 60 comprimidos tiene un costo de Bs. 35.662, mientras que la de 50 ml con la misma cantidad de comprimidos vale 26.964 bolívares.
“El Losartán regulado no nos llega desde diciembre, tenía un costo que oscilaba entre Bs. 15 y 52 dependiendo del laboratorio. Hay que entender que la hipertensión es una enfermedad crónica, por lo que el paciente no debería cambiar de medicamento, incluso de marca, ya que aquí en Venezuela no existen estudios de biodisponibilidad ni bioequivalencia que aseguren que el genérico sea igual a uno original o no”, manifestó Gil.
Larga lista
Otros medicamentos que se unen a la lista de los remedios más buscados son los antibióticos para niños y adultos. “Los antibióticos que nos han llegado tienen un costo de Bs. 45.000 en el caso de la Ciprofloxacina, los demás siguen desaparecidos”, dijo Gil.
Antimicóticos en cremas y óvulos no aparecen desde 2016, así como la insulina y anticonceptivos orales e inyectables. Los preservativos que venden en la mayoría de las farmacias son de marcas desconocidas o extranjeras y sus costos rondan los Bs. 1.500.
Fuente: Diario La Región / EMR
