“Se dio efectivamente una reunión entre Henri Falcón, dirigente de Avanzada Progresista y de la alianza “Concertación por el Cambio” con partidos provenientes de la Mesa de la Unidad Democrática, incluyendo a AD”. Fuenmayor señaló que en relación con esa reunión, la Concertación por el Cambio envió una nota de prensa a todos los medios, en la que deja claro las razones del “encuentro con otros sectores opositores del país”, así como con la necesaria unidad de los venezolanos en su lucha por el rescate del país de las manos una claque hegemónica, que pretende adueñarse del destino de todos los venezolanos“.
“El Gobierno de Maduro no tiene un respaldo popular más allá del 15 por ciento de la población. Es rechazado hasta por su misma gente, que hoy se enfrenta en una lucha interna que claramente ha trascendido a la prensa”, afirmó el ex Rector de la UCV y dirigente del Movimiento De Frente con Venezuela, que forma parte de la Concertación por el Cambio. Continuó diciendo que así como se reúnen con sindicatos, gremios, organizaciones populares y vecinales, para acompañarlas en sus luchas cotidianas, han mantenido reuniones con el Gobierno para efectuar las exigencias que hoy demanda la crítica situación venezolana; tienen también reuniones con los grupos disidentes del chavecismo, con el partido socialcristiano COPEI y, como ocurrió ayer, con factores de la Mesa de la Unidad Democrática. “Esas reuniones las hacemos públicamente, no se trata de conciliábulos, y por ello informamos inmediatamente a toda la ciudadanía del desarrollo de las mismas”.
A continuación comunicado de la Concertación por el Cambio
Concertación por el Cambio
La nueva unidad debe construirse de cara al país
Como quiera que ha causado algún revuelo la información ofrecida ayer en horas de la tarde tanto por Henri Falcón como, por su parte, Eduardo Semtei acerca de la reunión tenida entre varios factores de la oposición, la «Concertación por el Cambio» quiere expresar lo siguiente:
La nueva unidad en la que creemos debe construirse de cara al país. Si no hemos ocultado nuestras conversaciones con el gobierno, mucho menos podríamos hacerlo con aquéllas que tengamos con sectores de la oposición.
Confirmamos, con el rostro descubierto y a la luz del día, lo que ha sido y será nuestra posición frente a las tentativas unitarias: la unidad más amplia posible es deseable, pero nunca al costo de la ambigüedad en las definiciones estratégicas. Es por ello que volvemos a afirmar que la nueva unidad en la que creemos se basa en cuatro valores esenciales:
– El voto como instrumento de cambio.
– El diálogo y la negociación como vía para la resolución del conflicto venezolano.
– Protesta de calle pacífica.
– Defensa de nuestra soberanía, es decir, rechazo a las sanciones al país y a cualquier tipo de tutelaje extranjero sobre la oposición venezolana, siempre agradeciendo las muestras de solidaridad de otras naciones a las luchas democráticas del pueblo venezolano.
Si se nos invita a una unidad para debatir si votamos o no y si dialogamos o no, la Concertación no está disponible. Se trata de temas zanjados para nosotros. Votar, siempre. Dialogar, siempre. Protestar, pacíficamente. Aceptar injerencias extranjeras, nunca.
Al margen de estos temas y más allá de nuestros desacuerdos, podemos coordinar acciones concretas: una postura común sobre determinado tema, una denuncia, una marcha, etc. La Concertación está en la disposición de propiciar los encuentros necesarios a tales efectos.
La oposición venezolana, liderazgo, partidos, sociedad civil organizada y pueblo, retomará la ruta democrática extraviada del 2016 a esta parte. Nos comprometemos a poner todo nuestro empeño porque así sea. Que no olvidemos que en 20 años de confrontación con el régimen autoritario, todas las victorias han sido conseguidas a través de esa ruta democrática: electoral, pacífica, civil, nacional; y todas las derrotas han sido el resultado de los atajos extremistas. No nos dejemos sumir por el pesimismo: la oposición democrática ya ha probado en el pasado su rápida capacidad de recuperación. Obtengamos de nuestra propia historia las lecciones necesarias para encarar el porvenir. NP
MC
