«Recibimos con gran satisfacción el acuerdo alcanzado ayer entre la UE y el Reino Unido para el periodo de transición», manifestó la canciller en una comparecencia con Varadkar, y añadió que será uno de los puntos esenciales a debatir en la próxima cumbre comunitaria.
Merkel recordó que aún deben negociarse muchos puntos, como la cuestión fronteriza, mientras que Varadkar insistió en su rechazo a toda fórmula que implique una «frontera dura» entre ambos territorios
El acuerdo anunciado ayer por el negociador jefe de la Unión Europea para el «brexit», Michel Barnier, para un periodo de unos dos años de transición, centró la reunión de Merkel y Varadkar, incluida en la ronda de contactos bilaterales de la canciller ante el Consejo Europeo que se abrirá el próximo jueves.
Londres y Bruselas resolvieron así cuestiones como el plazo transitorio, durante el cual el Reino Unido no participará en la toma de decisiones de los 27, pero mantendrá el acceso directo y la unión aduanera.
Asimismo se alcanzó un consenso en lo relativo a los ciudadanos comunitarios que lleguen a territorio británico en ese periodo de transición después de que el Reino Unido abandone la UE el 29 de marzo de 2019.
Entre las cuestiones pendientes se encuentra la frontera entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, aspecto en el que Varadkar se vio respaldado por Merkel en su rechazo a una frontera dura y en la necesidad de mantener una «fuerte cooperación» entre ambos territorios.
«Tenemos que explorar nuevas posibilidades», insistió el jefe del Gobierno irlandés, para quien este punto debe ser una «cuestión central» en la negociación con Londres que, dijo, no podrá darse por «cerrada» hasta que no haya acuerdo en todos los puntos.
EFE/ FR
