Inicio Venezuela ¿Por qué a esto se lo lleva el diablo?

¿Por qué a esto se lo lleva el diablo?

Es increíble la cantidad de mentiras que por cada kilómetros cuadrado dicen gobernantes y oposición; es asombroso el comportamiento errático de toda la cúpula política. Abusan de la credulidad de la masa. Pero más asombroso y más increíble es la pasividad de la sociedad ante tanta farsa. De una sociedad así se puede esperar cualquier cosa, menos que le vaya bonito.

El gobierno declara que se estaban reuniendo escondidos con la oposición, por lo menos han mantenido cien reuniones. Esto quiere decir que si las reuniones se daban cada semana, hace más de dos años que perpetran estos encuentros, quiere decir que en plenas guarimbas se insultaban en las mañanas y en la tarde aún sin cambiarse de ropa se reunían. Pero hay algo en estas declaraciones que imputan al gobierno y a la oposición. Veamos.

Si es verdad que las reuniones se dieron, entonces el gobierno y la oposición son unos «rolos» de mentirosos. Pero si es mentira, el gobierno es un «rolitranco» de mentiroso y manipulador.

Esta es la situación real: la cúpula política, gobierno y MUD, son embusteros, perdieron la credibilidad. En este país ya no hay nadie en quién creer.

Estamos gobernados por estafadores, y lo que es peor, estafadores descubiertos, confesos, convictos. ¿Qué hacer?

En cualquier país serio estos pilletes debían renunciar, pero aquí en las orillas de Caribe huracanado vivimos en el realismo mágico. El gobierno y la oposición se pueden dar el lujo de engañar a todos, todo el tiempo y después decretar una rebatiña como el dakazo, o repartir unas cajas clap, o llamar al circo electoral y todo será olvidado, derogado. Y así vivimos, al día, mañana no existe, del ayer no me acuerdo.

Mientras pueblo y políticos juegan al circo, el petróleo se lo llevan los gringos, las transnacionales nos invaden sin disparar un tiro, los dólares se los roban, el oro se esfuma. Las transnacionales tranquilas, aquí todos narcotizados de estulticia no representamos peligro, el gobierno no aguanta una medio presión. Y si alguien insurge peligroso asesínenlo y después los tontos nombrarán una comisión secreta para averiguar qué pasó con el Mesías, o declararán que algún día se sabrá, no hay peligro para el capitalismo.

Por ahora, la idea que se encarnó en el Comandante Chávez ha quedado huérfana. La primera tarea es mantenerla viva; hablar de Socialismo, no dejar que nos lo cambien por ese fraude que es la democracia burguesa; tener esperanza que una idea justa, y el Socialismo es la más justa de las ideas, puede desde el fondo de una cueva derrotar a un ejército.

La gran fortaleza de la Revolución es la inutilidad de las acciones, las ideas contrarrevolucionarias no funcionan, necesariamente traen miseria y dolor a las mayorías, sólo sirven a una pequeña minoría que atiborrada de dólares y colesterol necesita de drogas para no aburrirse demasiado, infelices viviendo la desconfianza de los solitarios en medio de la muchedumbre.

Lanzar la semilla del nuevo mundo posible, y no perder la esperanza que en algún lugar unos jóvenes serán terreno fértil y la idea germinará, y en esos jóvenes provistos de los altos ideales renacerá Bolívar y Chávez. Esos jóvenes no mentirán jamás, tendrán sentido del momento histórico, entenderán, sentirán que sólo es posible la realización individual en medio de la sociedad, que la suerte de cada uno es la suerte de todos. Qué sólo con Socialismo habrá Patria y habrá Vida. Entonces la idea se habrá encarnado de nuevo y renacerá la esperanza de que se haga social y brille de nuevo la Revolución hoy traicionada. @elaradoyelmar
El arado y el mar (Toby Valderrama – Antonio Aponte)