Inicio Venezuela Posibilidad de diálogo requiere de confianza, según expertos

Posibilidad de diálogo requiere de confianza, según expertos

Un “grupo de contactos” para ver si existen las condiciones para facilitar un proceso político en Venezuela se propone crear la Unión Europea, y así lo dejaron saber los cancilleres esta semana. De concretarse sería el quinto intento de diálogo entre el Gobierno y la oposición venezolana, sin embargo, la tarea no está fácil pues la iniciativa ya suma detractores y dentro de la propia oposición, que en este momento se encuentra sin unidad y sin interlocutores que la representen.

El analista político colombiano, Fernando Giraldo, opinó que lo que está intentando la UE es aplicar la política de “garrote y zanahoria” al mismo tiempo.

“Por un lado presiona, mantiene las sanciones, van a seguir insistiendo en que el Gobierno tiene que dar un paso adelante, pero por el otro lado, también ha entendido que el problema de Venezuela es muy difícil encontrarle una solución de tipo militar o una eventual ruptura del sistema político venezolano, que tiene dificultades, pero que una ruptura total hace correr el riesgo de un baño de sangre en Venezuela, porque podría ocasionar disturbios políticos que nadie podría controlar después, y por otro lado causaría una desestabilización regional; entonces, para evitar eso, ellos buscan y entienden que como sea el conflicto de Venezuela debe ser resuelto internamente”, expuso el analista Giraldo.

Giraldo sostiene que la UE es un organismo de integración muy respetable, y mantiene la presión con las sanciones, pero también tiende la mano diciendo que quiere diálogo y que pone a disposición facilitadores para un acercamiento entre el Gobierno y la oposición.

“En las condiciones actuales que tiene el Gobierno me inclinaría por pensar que va a aceptar esta propuesta, primero, porque necesita desempantanar la situación porque está bloqueado completamente, tiene un bloqueo político internacional y económico que no lo puede resistir Venezuela, y si rápidamente no encuentra una salida acordada, consensuada o negociada terminará en un derrumbe social, económico y político. Es una oportunidad que sospecharía yo que el Gobierno podría tomar”, añadió Giraldo.

Por su parte, Miguel Tinker Salas, profesor de la Universidad de Pomona, en EE UU, opinó que el gran reto es que los diferentes grupos en Venezuela estén dispuestos a dialogar, pues dadas las condiciones es imposible creer que no se ha encontrado alguna forma para poder encontrar algún diálogo en el país. “Si alguna instancia internacional, en este caso la Unión Europea, puede facilitar eso sería un paso positivo, pero es difícil precisar lo que están proponiendo, porque por un lado tenemos al ministro español diciendo que no ha habido cambio de postura, por eso hasta que no haya una propuesta concreta es difícil pronosticar cuáles serán los cambios en la política, y el Gobierno no va a aceptar discursos sin levantamiento de sanciones. Estamos ante una encrucijada, qué se hace, quién va a ceder, qué se va a ceder, quién va a dar el primer paso”, consideró Tinker.

Ambos analistas coinciden en la necesidad de diálogo entre las partes, pero ante los constantes fracasos anteriores, en los que los actores en conflicto no cedieron a las peticiones ni se respetaron acuerdos, no hay confianza para un nuevo intento.

“Es necesario que los diferentes sectores de la sociedad conversen, o nos quedamos a nivel de discurso, o iniciamos un diálogo que nos lleve a un consenso sobre los grandes problemas nacionales. Sin embrago, no hay confianza, porque esto se ha tratado ya en múltiples ocasiones y hemos llegado al mismo punto, por eso existe un cinismo en el país entre todas las fuerzas, incluso de la izquierda, Y mientras continúen las mismas fuerzas políticas y no aparezcan fuerzas políticas nuevas, yo no veo que esto produzca algún cambio”, añadió Tinker Salas.

No se habían sentado los cancilleres europeos a debatir el tema Venezuela cuando aparecieron los detractores del diálogo, los dirigentes políticos con posiciones más radicales en la oposición.

“En Primero Justicia estamos negados a que se produzca el diálogo porque lo que el Gobierno busca con eso es burlarse de los interlocutores y mediadores. Este no es un momento para sentarse a dialogar”, sentenció el diputado a la AN, Juan Pablo Guanipa.

Otro que sí busca una alternativa desde el exterior, pero después de una eventual salida del Gobierno, es el exalcalde Antonio Ledezma, quien se reunió con el gobernador de Puerto Rico y demás autoridades, y hasta firmó un acuerdo de cooperación a fin de diseñar la “acción logística para ofrecer planes de socorro humanitario para millones de venezolanos”. La iniciativa se concretaría en el momento en que se salga del Gobierno y se instale la “transición” en Venezuela.

Al respecto, Tinker Salas opinó: “Me llama la atención porque eso fue lo que hizo Rómulo Betancourt cuando AD fue expulsada en el 48, después del trienio, se fue a Puerto Rico y se juntó con el gobernador, y junto con él y otros iban a regresar la democracia a Venezuela por Puerto Rico, cuando esa es una colonia, me pareció absurda la propuesta”.

El profesor de la Universidad de Pomona advierte que Venezuela tiene que resolver sus problemas, “no tiene que resolverlos ni la Unión Europea, ni el Grupo de Lima, ni ningún otro grupo, lo tienen que resolver los venezolanos”.

Fuente: Panorama / AM