La libra esterlina siente esta mañana la presión de un dólar en plena recuperación al volver a los mercados las subidas de las rentabilidades, tras tomarse ayer una pausa. No deben llamarnos la atención los movimientos de precios de la libra puesto que se mantienen en línea con la cotización del euro frente al dólar, de forma que el par GBPEUR se mantiene plano esta mañana. Al estar la atención centrada en los presupuestos de mañana, no parece probable que durante la jornada de hoy la libra esterlina se aparte del grupo en su cotización frente al dólar. Mientras tanto, es probable que los medios sigan filtrando partes del presupuesto, como por ejemplo el inesperado paquete de 408 millones de libras destinado a los museos y a las artes, mientras se mantiene el debate sobre las posibles subidas de impuestos. Por otro lado, los datos publicados esta mañana mostraron un nuevo incremento de los precios de la vivienda en febrero, en esta ocasión del 0,7% intermensual (6,9% interanual) puesto que los inversores están adelantando algunas de sus compras para aprovecharse de las exenciones en el impuesto sobre transmisiones. Sin embargo, el presupuesto que se desvelará mañana podría traer también una ampliación de tres meses de estas exenciones fiscales, lo que contribuiría a mantener el crecimiento del mercado de la vivienda en el Reino Unido.
El dólar avanza con firmeza esta mañana, tras tener una sesión dispar ayer. Durante el lunes la cotización del dólar se mantuvo en la mitad del grupo del G10 al deshacerse en parte los incrementos de rentabilidades tras la indicación del Banco de la Reserva de Australia de que adquiriría valores en los plazos más largos. Sin embargo, esta mañana, parece que los mercados de renta fija de los países más desarrollados retoman su senda habitual. El billete verde se aprovecha del entorno de subidas en las rentabilidades y de presiones a la baja sobre los valores, que impulsan los entornos de aversión al riesgo. Esta mañana, todas las divisas del panel del G10 han entrado en números rojos frente al dólar, con el índice general DXY subiendo en un cuarto de punto porcentual. Hoy los mercados centrarán su atención en los debates sobre la economía estadounidense presididos por el gobernador de la Fed Brainard, a las 19:00 CET, puesto que se producen en un momento en que el resto de los bancos centrales tienen mucho interés en calmar las apuestas por políticas reflacionarias de los mercados de renta fija. Sin embargo, al contrario que sus homónimos en el G10, la Reserva Federal ha adoptado últimamente un tono de libertad de acción al declarar que ve positivas las subidas en las rentabilidades a más largo plazo puesto que indican una mejora en las expectativas de crecimiento.
El dólar canadiense se aprovechó ayer de la subida de los valores estadounidenses subiendo 0,59% frente al dólar estadounidense pese a que el crudo WTI volvió a caer hacia los 60 $. El dólar canadiense tiene una fuerte correlación con el índice S&P 500, y ambos son un buen barómetro para evaluar el sentimiento general de búsqueda o aversión al riesgo. Al experimentar este índice sobre los valores estadounidenses su mayor subida en un día en más de nueve meses, ya que subió 2,38%, el loonie aprovechó el reflujo para tratar de recuperar las pérdidas del viernes. Sin embargo, esta mañana, los últimos movimientos en los precios parecen indicar que el loonie va a desandar esta senda al caer los precios del petróleo por debajo del límite de los 60 $ y al dejarse sentir el entorno reflacionario en los futuros sobre valores estadounidenses. Los datos de ayer mostraron que el índice de confianza Bloomberg Nanos ha subido del 58,2 al 59,4 durante la última semana de febrero, probablemente una consecuencia más de la relajación de las condiciones de confinamiento en Canadá. Aun así, el 38% de los encuestados creen que la economía empeorará durante los próximos seis meses, y tan sólo un 9% esperan que los precios de la vivienda caigan durante el próximo año. Hoy toda la atención se centrará en la publicación del PIB de diciembre y, por tanto, de los resultados para todo el año. Los analistas esperan una contracción del PIB del pasado año de más del 5%, en la media de las economías avanzadas.
