El Consejo de Ministros aprobó hoy la nueva senda de estabilidad presupuestaria para el periodo 2020-2023, que recoge unos objetivos de déficit y deuda pública más flexibles, así como el nuevo cuadro macroeconómico sobre el que se elaborará durante las próximas semanas el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para este año. En la rueda de Prensa posterior al Consejo de Ministros, el Gobierno ha anunciado una nueva rebaja de la previsión de crecimiento para este año, situándola en el 1,6% en 2020, lo que supone una caída de dos décimas de lo adelantado por el Gobierno en su último ajuste, cuando su previsión para 2020 estaba en el 1,8%.
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También ha dado el visto bueno a un límite de gasto no financiero para 2020 de 127.609 millones de euros, lo que supone un 3,8 % más respecto al presupuesto base de 2019 establecido en 122.899 millones, año en el que se rechazaron las cuentas presentadas por el Gobierno socialista. Además, el Gobierno ha fijado el objetivo de déficit público para este año en el 1,8 % del PIB, lo que supone una flexibilización de 1,3 puntos respecto al 0,5 % todavía vigente aprobado en 2017 y una décima más respecto a la desviación al 1,7 % que el Ejecutivo comunicó el año pasado a Bruselas.
El Gobierno ha aprobado un nuevo cuadro macro, que incluye una revisión a la baja de su previsión de crecimiento económico también para 2021, 2022 y 2023, hasta el 1,5 %, 1,6 % y 1,7 %, respectivamente.
Asimismo, la previsión de creación de empleo se rebaja seis décimas, hasta el 1,4 %, en tanto que la tasa de paro se sitúa en el 13,6 %, frente al 12,3 % del último cuadro macro de octubre de 2019.
El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) aprobó el pasado viernes la relajación de los objetivos de déficit para las regiones, estableciendo un déficit del 0,2 por ciento del PIB este año, del 0,1 por ciento en 2021 y equilibrio presupuestario desde 2022. Con esta senda el Gobierno da más flexibilidad para el cumplimiento, puesto que el objetivo autonómico previsto inicialmente por el Ejecutivo de Sánchez era de un déficit de una décima del PIB este año, y que las regiones lograsen estabilidad presupuestaria ya el año que viene.
