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Ayuso, en Barcelona: “Un catalán paga 600 euros más que un madrileño al año para mantener su Ejecutivo”

“Conmigo cada madrileño se ha ahorrado 6.700 euros”, ha dicho, al tiempo que alerta de que ha cargado contra el «impuesto de solidaridad» de Sánchez.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha defendido en Barcelona su política fiscal frente a la del Gobierno central.

“Gobernar no es recaudar, gobernar es gestionar. Por eso, no es cierto que subiendo impuestos se sufraguen mejor la educación o la sanidad pública”, ha manifestado en un evento de Nueva Economía Fórum en la Ciudad Condal.

En este sentido, la presidenta madrileña ha dado cifras: “Un catalán paga 600 euros más que un madrileño al año para mantener su ejecutivo económico”, ha dicho, “conmigo cada madrileño se ha ahorrado 6700 euros”.

En su opinión, bajo el eufemismo de impuesto de solidaridad, el Gobierno ha impuesto a las comunidades gobernadas por el PP un nuevo impuesto de Patrimonio que puede echar de Madrid a 13.000 contribuyentes que pagan más de 5.000 millones de euros de impuestos.

Ayuso ha presentado el “puente hispano” entre Madrid y Barcelona, un trayecto “alimentado por el mestizaje, la apertura y la celebración”. La presidenta ha explicado que, para entender el papel de la Hispanidad en el contexto actual, hay que analizar los retos principales a los que España se enfrenta actualmente, donde destaca la defensa de la Constitución y los valores de la democracia liberal, la unidad del país o el salir “de la espiral decadente y empobrecedora en la que estamos inmersos”.

“La miseria llama a la miseria y, precisamente, ahora es cuando hay que abrir las puertas, encender la luz, dar confianza y facilidades tratando de evitar alimentar una pretendida lucha de clases maniquea que busca enemigos externos de manera insultante”, ha manifestado.

«Espiral autoritaria asfixiante en Cataluña»

La presidenta ha manifestado que lo que ocurre en Cataluña preocupa en Madrid, ya que se esta produciendo una «espiral asfixiante” y autoritaria.

“Con la aquiescencia del Gobierno” central, las familias son identificadas y “tienen miedo a ver cómo arrinconan a sus hijos cuando no son marcadas por sus propios vecinos, los universitarios se ven suspendidos o los comerciantes señalados, los aspirantes a la función pública apartados o los artistas ninguneados”, ha indicado.

En este sentido, la presidenta ha advertido del uso de “eufemismos” y “marketing” que se está empleando “para imponer un proyecto autoritario, para tenernos distraídos para olvidarnos de lo importante”. “Derecho a decidir es dar la espalda a las leyes para inventarse supuestos procesos democráticos, que no son más que la manipulación de la opinión a favor de un proyecto de ruptura tan ilegal como falso”, ha apuntado.

Otro de los ejemplos expuestos por la presidenta autonómica ha sido el de hablar de armonización fiscal, cuando es “la arremetida contra las políticas de éxito de Madrid” o de “soberanía y pobreza energética” para maquillar su fracaso en política en esta materia. “España multinivel es su incapacidad de hacer funcionar el Estado de las autonomías y la descentralización” es su empeño por descapitalizar la capital de España”, ha remarcado.