Inicio Actualidad Escándalo en Reino Unido: la policía no quiere investigar una serie de...

Escándalo en Reino Unido: la policía no quiere investigar una serie de violaciones a menores de edad cometidas por paquistaníes por miedo a ser tratada de racista

La pasada semana, el diario BirminghamLive dio a conocer una investigación que está llevando a cabo la justicia británica de un grupo de policías del condado de West Midlands (Inglaterra) que encubrieron una serie de violaciones a menores de edad.

Según declararon fuentes cercanas al caso, los agentes de seguridad encubrían los hechos por temor a ser tratados de racistas, puesto que la mayoría de los incidentes fueron protagonizados por paquistaníes, sirios, yemeníes y refugiados de otros países del Medio Oriente.

El terrorista islámico reformado Maajid Nawaz ha revelado con mucho detalle la dificultosa situación en la que se encuentras los agentes de policía, políticos, medios de comunicación e instituciones que muchas veces tienen miedo de informar sobre incidentes cometidos por inmigrantes musulmanes por el miedo a ser «cancelados» por la izquierda progresista y tildados de «xenófobos» y «racistas».

Maajid Nawaz, ex-candidato en 2015 a diputado por el Partido Liberal Demócrata y hoy director de la musulmana anti-extremista Fundación Quilliam.

Por su parte, el diario derechista Breitbart reveló cómo se coordinan los grupos progresistas en Gran Bretaña para detectar con rapidez cualquier situación que pueda ser considerada racista por el correctismo político y atacarlo con ferocidad en redes sociales.

Maajid Nawaz, ex-candidato en 2015 a diputado por el Partido Liberal Demócrata y hoy director de la musulmana anti-extremista Fundación Quilliam.

En respuesta a las revelaciones, la Policía de West Midlands se disculpó con la ciudadanía y afirmó haber cometido errores con este asunto. De todos modos, según el diario The Telegraph, por ahora ningún policía o funcionario gubernamental ha sido acusado ante la Justicia por estos hechos.

Desde la masiva invasión de refugiados musulmanes desde África y Medio Oriente al Reino Unido y a gran parte de Europa, estos hechos no paran de acrecentarse. Muchas veces, el contraste cultural entre el Islam y la cultura occidental, europea, judeo-cristiana y británica lleva al conflicto social.

Por ejemplo, un reconocido caso sucedió a principios de la década del 2000 conocido como la Operación Augusta, cuando una investigación reveló una red de trata sexual infantil de inmigrantes paquistaníes.

Debido al estigma de apuntar directamente contra las comunidades islámicas en el país europeo, la policía tardó mucho más de lo debido en resolver el asesinato de una paquistaní menor de 15 años que había sido violada por un hombre de 50 años que le inyectó una sobredosis de heroína, mientras pertenecía a esta red.