Inicio Actualidad Sánchez blinda a ERC como socio prioritario en un año electoral

Sánchez blinda a ERC como socio prioritario en un año electoral

Después de diez años de prórrogas presupuestarias y pactos entre los separatistas, Cataluña vuelve a la casilla de salida: el tripartito. El apoyo presupuestario del PSC a ERC en la Generalidad es para los socialistas algo «histórico» que «rompe bloques». En Moncloa añaden que es «muy positivo» que, en estos tiempos «de incertidumbre», Cataluña vuelva a contar con Presupuestos.

Lo cierto es que, en el ámbito catalán, el PSC y ERC son unos viejos socios conocidos. El pacto actual parece una reedición a la inversa de las coaliciones que gobernaron Cataluña entre 2003 y 2010. Hay diferencias: esta vez los socialistas ofrecen su apoyo de forma externa y con ERC y no el PSC en la presidencia. Los herederos de ICV, los comunes, también están en el pacto desde hace unos meses.

Barcelona, más cerca del PSC

Lo cierto es que de esas «ruptura del bloque» separatista habrá un gran beneficiado: el PSC. Los socialistas buscan recuperar la alcaldía de Barcelona. Las últimas encuestas internas señalan que será una cosa entre Jaume Collboni (PSC) y Xavier Trias (Junts). El que quede primero tendrá más margen de actuación pero no necesariamente sumará.

Los comunes de Ada Colau, que según las encuestas podrían quedar terceros, serán claves y ya advierten que no votarán al candidato «de la derecha». Optarían por sus socios de Gobierno en el Ayuntamiento. Algo similar podría suceder con ERC. La alcaldía de la Ciudad Condal es uno de los planes de Sánchez para eclipsar cualquier pérdida autonómica en mayo y exhibir como un gran triunfo lograr de nuevo la alcaldía de la segunda ciudad española.

El PSC también vería con buenos ojos retener la Diputación de Barcelona cambiando a Junts por ERC, que seguiría sumando poder.

Y Sánchez en unos meses

En la Moncloa reiteran que no ha habido cambalaches, pese a que el voto de ERC es decisivo en algunas de las leyes que están estancadas (Seguridad Ciudadana y Vivienda), pero defienden que «cada uno tendrá su ámbito de actuación«.

Lo cierto es que este pacto blinda a ERC como socio prioritario y rebaja las exigencias de cara a una nueva investidura de Sánchez. Aragonés quiere poner como condición un referéndum separatista tomando como referencia el de Montenegro. Los socialistas aseguran que eso «no es negociable» y confían en que, con su respaldo Presupuestario, rebajen las exigencias de cara a un hipotética negociación de investidura tras las generales de diciembre.

«Tragando sapos»

A cambio del apoyo del primer secretario del PSC, Salvador Illa, Pere Aragonés «ha tenido que tragar unos cuantos sapos», afirman en el PSOE, y ponen como ejemplo su oposición al complejo de casinos Hard Rock Café en Salou o la ampliación del aeropuerto del Prat. Aunque también defienden que le dejan «margen de actuación» para proteger, por ejemplo, el Delta del Llobregat lo que podría retrasar los planes .

«Cada cosa en su sitio», añaden en la Moncloa donde creen que es positivo «negociar políticas concretas». Políticas en la que los socialistas podrían salir beneficiados.