En respuesta a la polémica suscitada por el supuesto acuerdo con el que se estaría favoreciendo al hijo del alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, el burgomaestre señaló que detrás de la acusación no hay más que politiquería.
Hernández y su hijo Luis Carlos fueron señalados el 14 de noviembre ante la Procuraduría Segunda Delegada de Contratación por, presuntamente, haber suscrito un acuerdo entre la Empresa de Aseo de Bucaramanga (Emab) y Vitalogic RSU para el manejo de residuos sólidos del relleno sanitario El Carrasco. Según el ciudadano que hizo la denuncia, así se favorecería al hijo del mandatario, quien recibiría comisiones por la adjudicación del contrato.
No obstante, aclara la administración local, el contrato, avaluado en 250 millones de dólares, finalmente no se adjudicó, ya que se descartó la contratación directa como mecanismo de desarrollo apropiado, atendiendo las recomendaciones de la Procuraduría.
“La Alcaldía rechaza de manera categórica cualquier intervención indebida de particulares en asuntos públicos y aclara que la Emab no ha adjudicado ningún contrato relacionado con las nuevas tecnologías para el tratamiento y aprovechamiento de las basuras”, aclaró un comunicado de la Alcaldía.
En el mismo, Rodolfo Hernández aclaró: “En defensa de lo público, no permitiré que ‘lobistas’, no importa quiénes sean, contaminen las tareas, los proyectos o los programas de la administración municipal”.
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