Dos familias nariñenses lloran la muerte de dos jóvenes cadetes que se preparaban en la escuela de Policía General Santander, en Bogotá, blanco del atentado terrorista del pasado jueves.
Se trata de los cadetes Christian Fabián González Portilla, oriundo de Pasto y de 20 años de edad y Carlos Daniel Campaña, oriundo de Puerres y de 19 años.
El comandante del Departamento de Policía Nariño, coronel Haidiber Restrepo, confirmó que los jóvenes cadetes oriundos del departamento habían perdido la vida en el lamentable ataque.
«En este momento estamos haciendo todo el acompañamiento a sus familiares para que se dirijan a la ciudad de Bogotá a recibir los cuerpos de sus hijos», declaró.
Dijo que los dos cadetes cursaban un año y medio en la institución y estaban en el proceso para ser oficiales de la Policía.
«Eran buenos estudiantes, jóvenes que en sus comunidades, en sus barrios, en sus colegios eran muy apreciados», destacó Restrepo, quien además reconoció que eran muy apreciados, de conductas intachables y de familias humildes de Nariño.
«Es un momento muy doloroso para las familias, saber que su hijo perdió la vida apenas empezando su vida y que era la ilusión de su familia da tristeza», añadió.
Tanto González como Campaña eran deportistas de alto rendimiento e integraban la liga de atletismo de las Fuerzas Armadas.
El alcalde de Pasto, Pedro Vicente Obando, rechazó de manera enérgica el atentado y afirmó «enviamos nuestra voz de solidaridad a los hombres y mujeres de la Policía Nacional, al tiempo que expresamos nuestras sentidas condolencias a los familiares de las víctimas de este acto criminal, en especial a la familia del joven cadete pastuso Christian Fabián González Portilla»
El cadete González había nacido en el corregimiento de La Caldera, donde sus seres queridos esperan la llegada de su cuerpo para darle cristiana sepultura.
Por su parte el gobernador de Nariño, Camilo Romero, lamentó el hecho, pidió que castigue con todo el rigor a los responsables y señaló que «hablé con sus madres y sentí el dolor en carne propia. Hay luto en el gran sur».
PASTO
