La ciudad es el bastión del reguetón; esa mezcla de sonidos caribeños que llegó a principios de siglo a Colombia hoy está consolidada como la música popular más escuchada en la ciudad.
J Balvin es uno de los iconos que evidencia el ascendente camino del reguetón hacia la cima del ‘meanstream’, pero, ¿qué le deja esta música a la ciudad y por qué compaginó tanto con Medellín?
En un evento de la relojería suiza Tag Heuer, en el que se presentó un documental sobre la vida de José Álvaro Osorio, conocido como J Balvin. El cantante tuvo tiempo para reflexionar sobre su ciudad, la misma que acogió al reguetón como hijo adoptivo que va camino a convertirse en hijo pródigo.
El artista habló sobre la relación que tiene el reguetón y Medellín, y aquellos puntos de convergencia como lo son las clases populares.
No me siento orgulloso de la actitud de maleantes y narcos en la música
-¿El reguetón le deja algo malo a la sociedad? , le pregunté hace unos días a José en un ascensor durante el evento citado anteriormente. “Nada, nada. Todo es positivo”.
Respuesta que no concuerda con la publicación en la que llama ‘payasos’ a sus colegas que rinden culto a la figura delincuencial y a la ilegalidad. “Me gustaría llevarlos a un barrio de mi ciudad a ver cuántos de los más ‘calle’ del genero no salen corriendo al ver la cruda realidad”, concluyó el artista.
–¿Qué piensa cuando ve que en Latinoamérica hay tantos problemas sociales?
-“Siempre quiero transmitirles buenas energías y mensajes positivos, tolerancia, trabajar con disciplina, ese siempre es el mensaje”.
En el documental, realizado por Noyse especialmente para esta campaña de la relojería, Medellín fue protagonista. «Tengo un cariño por Medellín porque siento que me recarga y por más viajes que haga sigo pensando que es la ciudad con la que tengo un contacto especial», expresó el cantante.
La producción muestra la conflictiva realidad que vivió la ciudad y el país en los años 80 y 90, cuando el narcotráfico tuvo su auge.
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Incluso el mismo alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, celebró las declaraciones del artista paisa. «Alguien tenía que decirlo. Exaltar la cultura mafiosa nos hace mucho daño como sociedad» publicó Gutiérrez en su Twitter, aunque dice que envía el agradecimiento no sólo como primera autoridad del municipio sino también como ciudadano.
En los últimos años cantantes de reguetón se han visto envueltos en polémicas debido a declaraciones en las que hacen referencia a la ciudad, relacionándola con el narcotráfico y su cultura delincuencial. Entre ellos está J Álverz quien hace dos años vino a cantar a la y se tomó una foto con una camiseta que decía «Escobar». Para ese momento el alcalde también se pronunció y en ese momento llamó la atención al puertoriqueño quien había sido contratado por la Alcaldía para cantar en Feria de las Flores.
Bryan Andrés González Vélez
Para EL TIEMPO
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