Inicio Colombia Un Manizaleño, receta de café que busca ser marca

Un Manizaleño, receta de café que busca ser marca

Una taza de café con características especiales de olor, sabor y cuerpo suave es lo que caficultores y promotores de esta iniciativa quieren que encuentren los consumidores cada que pidan Un Manizaleño.

«Se van a encontrar con un café de cuerpo muy sedoso, notas ahumadas por la madera y un ligero sabor a licor. Es balanceado, dulce y suave para la percepción en la boca”, expresa Juan Carlos Alarcón, experto catador de café y responsable de la receta.

Una preparación desarrollada por catadores e investigadores del Sena Regional Caldas que, en búsqueda de una nueva preparación que tuviera ingredientes autóctonos de la ciudad, encontraron en los licores propios y el roble una mezcla que conjuga la identidad manizaleña.

“Siempre que vamos a una finca nos dan café hecho en agua de panela, entonces el dulce era importante. Luego pensamos en los productos por lo que nos recuerdan en todo el mundo y llegamos hasta el Ron Viejo de Caldas”, mencionó Alarcón.

Quince gotas de ron, 15 de anís o aguardiente sin azúcar, 30 gotas de miel y un par de notas de roble, madera en que se añeja el ron, son los ingredientes que acompañan un espresso hecho con café de la más alta calidad y producido únicamente por caficultores de Manizales.

Mezclados, y al pasar por la lanceta y el vaporizador, estos sabores esperan evocar en quienes lo prueben recuerdos de los arrieros campesinos o de las particulares calles del centro histórico de la ciudad.
 
Para que cumpla ese objetivo los investigadores trabajaron en competir por sabor y preparación con uno de los productos preferidos de los consumidores, el americano. “Buscamos que fuera una bebida práctica y económica, pero con la garantía de que nos represente en cualquier parte del mundo”, apunta Alarcón.

Una mujer tiene la responsabilidad de que la presencia de Un Manizaleño se vaya fortaleciendo hasta el punto de volverse el más típico de la ciudad. Flor es una caficultora que quiere representar al grano de Manizales igual de bien que Juan Valdez representa al de Colombia.

“Con Flor queremos reflejar el empoderamiento y potencial de la mujer en el campo. Ella reúne las cualidades de la mujer verraca que, aparte de caficultora, es estudiante y emprendedora», comenta Manuela Gallego, la joven que personifica a Flor.

“Crecí y vivo entre cafetales, amo el café y quiero impulsarlo de manera correcta, por eso me preparé. Soy barista, tengo estudios en catación y análisis de café, ahora voy a estudiar administración de empresas agropecuarias esperando ser parte del relevo generacional que requiere el campo colombiano”, señaló.

Flor no solo quiere mostrarle a los visitantes esta taza de café especial, también desea que los manizaleños se apropien de la receta, que «sea cotidiana, hasta el punto de que puedan prepararla en sus casas. Que signifique cultura y unión”.

Para Fenalco y la Alcaldía de Manizales, promotores de esta iniciativa, otras bondades del producto son: que se ayuda a la comercialización de los cafés especiales de pequeños productores, se capacita a baristas para que no se pierda la calidad del grano y que se muestra a los jóvenes lo importante de su permanencia en el campo.

“Con esta preparación ponemos herramientas a disposición de nuestra tradición para que esta prevalezca. Qué bueno que optemos por un producto local por encima de un americano o de un cappuccino que es italiano”, comentó la Secretaria de Tecnologías de la Invocación de Manizales, María Margarita Builes.

Manizales ya tiene entonces un café que solo puede tomarse aquí y, desde hace dos semanas, tiene vía libre para hacer parte de la Asociación de Municipios del Paisaje Cultural Cafetero, con lo que podrá gestionar recursos para invertir en propuestas en torno al grano y sus derivados.

El costo de esta bebida especial no supera los 4.000 pesos y ya puede disfrutarse en 35 cafés de la ciudad, 17 ubicados en el centro histórico. Al llegar a ellos se podrá encontrar una placa que refiere “aquí se vende Un Manizaleño”.

LAURA USMA CARDONA
PARA EL TIEMPO