El presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, ha reprochado al presidente Pedro Sánchez que el acercamiento de presos de ETA a Euskadi no sea sólo «una estrategia», sino «un pacto bochornoso» para asegurarse el apoyo de EH Bildu.
Instituciones Penitenciarias acordó ayer el traslado desde la prisión de Huelva a la de Estremera, en Madrid, de unos de sus dirigentes más destacados de ETA, Francisco Javier García Gaztelu, Txapote, condenado por decenas de asesinatos, entre ellos el de Miguel Ángel Blanco.
Junto a él, dejará la cárcel onubense e ingresará en la misma de Madrid su compañera, la etarra Irantzu Gallastegi Sodupe, Amaia. Además, otros tres presos de la banda y uno del GRAPO cambiarán de cárcel, según informó ayer Instituciones Penitenciarias.
En un mensaje en redes sociales, el presidente del PP vasco ha indicado que «Sánchez y Marlaska acercan todas las semanas a cinco presos etarras al País Vasco con o sin arrepentimiento».
«No es sólo una estrategia -ha añadido Iturgaiz-, sino un pacto bochornoso con el brazo político de los asesinos de ETA, y así asegurarse el apoyo de Bildu para mantener la mayoría en el Congreso».
