El presidente ruso, Vladímir Putin, dijo este martes no entender por qué la ciudadana rusa María Butina se encuentra encarcelada en EEUU acusada de espionaje, dado que “nadie” en los servicios de inteligencia de Rusia sabe quién es.
“Esta pobre joven mujer está detenida y se enfrenta a 15 años de prisión. ¿Por qué?”, se preguntó Putin durante una reunión con los miembros del Consejo Presidencial ruso de Derechos Humanos.
“Cuando me enteré de lo que le ocurrió pregunté inmediatamente a los jefes de nuestros servicios especiales quién era. Nadie sabe absolutamente nada de ella, salvo algunos en el Consejo de la Federación (Senado), donde al parecer ella había trabajado para uno de los senadores. Eso es todo”, sostuvo el mandatario ruso.
Putin hizo estas declaraciones tras publicarse que Butina podría declararse culpable en el proceso que comenzará a mediados de diciembre a raíz de documentos judiciales en los que la defensa informa al tribunal que lleva su caso de que su clienta quiere cambiar la declaración que hizo anteriormente, en la que insistió en su inocencia.
Butina, de 30 años, fue detenida a mediados de julio en Washington por ser una supuesta agente ilegal del Kremlin, después de que el FBI relatara los esfuerzos de la joven por tejer una red de influencias en la política nacional mientras permanecía en el país con una beca de estudiante.
Según las autoridades estadounidenses, Butina puso en marcha una supuesta operación para tratar de favorecer los intereses del Kremlin en EEUU, primero desde territorio ruso y luego en el estadounidense.
Las conexiones de Butina, que trabajaba para un alto funcionario ruso, le llevaron a mantener encuentros con políticos estadounidenses y con la influyente Asociación Nacional del Rifle (NRA, en inglés).
Desde su detención, sus abogados habían rechazado las acusaciones y pedido su liberación, y el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso llegó a poner en marcha una campaña para liberarla, ya que la consideran una “presa política”.
