MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) –
El presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, ha prometido este lunes trabajar para toda la población «sin discriminación», en sus primeras declaraciones tras obtener la reelección con el 97 por ciento de los votos.
«Los que han renovado su confianza en mí no son diferentes a los que hicieron lo contrario. Egipto incluye a todos, siempre y cuando las diferencias de opinión no arruinen la causa nacional», ha dicho.
Así, ha manifestado que «los puntos en común son mayores que las ideologías inamovibles o los intereses limitados», al tiempo que ha apuntado «no tener duda en la inteligencia de la nación egipcia».
El Sisi ha dado además las gracias al único candidato que se enfrentó a él en los comicios, Musa Mostafá Musa, a quien ha descrito como una persona «que llevó a cabo una batalla electoral patriota y noble».
El presidente ha obtenido un porcentaje de votos similar al que ya alcanzó en 2014 en sus primeras elecciones tras liderar un golpe de Estado. En concreto, ha revalidado el mandato gracias a haber logrado un 97,08 por ciento de los sufragios válidos.
Esta proporción implica que Al Sisi obtuvo un total de 21,8 millones de apoyos en los dos periodos abiertos para que los egipcios ejercieran su derecho al voto, el último de los cuales tuvo lugar entre el 26 y el 28 de marzo y correspondió a los residentes en Egipto.
Tanto Al Sisi como Musa habían pedido a la población una alta participación, en un proceso ampliamente criticado por la falta de aspirantes y la eliminación de las candidaturas de los principales opositores del país.
Sin embargo, tan sólo acudieron a votar un 41 por ciento de los electores, según los datos oficiales difundidos por el periódico estatal ‘Al Ahram’. Así, de los más de 59 millones de personas que estaban llamadas a las urnas, únicamente votaron 24,2 millones.
La Autoridad Nacional para Elecciones (NEA) llegó a amenazar con sancionar a los egipcios que estuviesen inscritos en el registro de votantes y no acudiesen a las urnas. El número total de votos anulados superó los 1,7 millones, equivalente al 7,27 por ciento de las papeletas depositadas durante estos comicios.
MUSA DICE QUE LAS ELECCIONES FUERON «JUSTAS»
Por su parte, Musa ha reaccionado también al anuncio de los resultados oficiales, días después de reconocer su derrota y asegurar que el apoyo que había obtenido en las urnas era «excelente».
«Las elecciones presidenciales fueron jutas y sirven como modelo de integridad», ha dicho, antes de recalcar que cualquier otro candidato que se hubiera presentado hubiera obtenido menos votos que él.
«Si hubiera competido en las elecciones contra otro candidato que no fuera el presidente Al Sisi, hubiera tenido más votos, seguro», ha sostenido, tal y como ha recogido ‘Al Ahram’.
El propio Musa afirmó la semana pasada que decidió presentarse a las elecciones «demasiado tarde» y argumentó que no organizó una gran campaña de propaganda –de hecho, casi no participó en actos antes de los comicios– debido a la falta de recursos económicos para poder financiarlos.
Musa, que presentó su candidatura horas antes del cierre del plazo y que hasta entonces había organizado actos en apoyo a la reelección de Al Sisi, dijo que está «satisfecho» con los resultados y recalcó «estar más preocupado por su deber patriótico hacia el país».
«No era aceptable que Al Sisi se presentara solo a las elecciones y dar así a los enemigos del país la oportunidad de criticarnos», explicó, al tiempo que manifestó que su intención es encabezar una oposición «constructiva».
Esto es algo que será probablemente rechazado por los partidos opositores del país, que se negaron a respaldar su candidatura y abogaron por un boicot para protestar contra la decisión de las autoridades de apartar de la carrera electoral a los potenciales rivales de Al Sisi con más apoyo.
