Inicio Motor Cómo limpiar el tubo de escape paso por paso

Cómo limpiar el tubo de escape paso por paso

limpiar el tubo de escape

El tubo de escape es uno de los elementos del coche (o moto) que menos atención suele recibir, pero es importante, no solo por el catalizador para reducir las emisiones, o para su objetivo de eliminar los gases de la combustión, también puede influir incluso en el rendimiento del motor. Por este motivo, vamos a ver cómo se puede limpiar el tubo de escape paso a paso.

Además, verás las consecuencias de no tenerlo limpio, lleno de carbonilla, y que incluso podría afectarte para pasar las revisiones periódicas. Así que, vamos a ponernos manos a la obra, y dejar el escape como los chorros del oro…

El tubo de escape: la pieza clave y el gran olvidado

escape

El tubo de escape, a menudo subestimado, es un componente crucial. Su función principal es la de expulsar los gases nocivos producidos durante la combustión del combustible, pero su trabajo no termina ahí. El tubo de escape también juega un papel fundamental en la reducción de las emisiones con el catalizador, reducir el ruido producido por el motor, ya que un motor sin escape produce un ruido infernal, e incluso la geometría de los escapes pueden influir en el rendimiento del motor, lago que se estudia mucho en el motorsport.

Los componentes del sistema de escape tenemos las siguientes partes que deberías conocer para realizar la limpieza y mantenimiento oportuno:

  • Colector: recoge los gases de combustión de cada cilindro del motor y los canaliza hacia un único tubo.
  • Catalizador: neutraliza los contaminantes nocivos presentes en los gases de escape, transformándolos en gases menos perjudiciales para el medio ambiente.
  • Filtro de partículas (en motores diésel) o sonda lambda (en motores de gasolina): estos componentes trabajan en conjunto para optimizar la combustión y reducir las emisiones contaminantes.
  • Silenciador: atenúa el ruido producido por la explosión de gases en el interior del motor.

¿Qué pasa si el tubo de escape esta sucio o con mal mantenimiento?

Prueba humos

Un tubo de escape obstruido por carbonilla y hollín puede tener graves consecuencias para el vehículo:

  • Pérdida de potencia: la obstrucción dificulta la salida de los gases de escape, lo que reduce la eficiencia del motor y provoca una pérdida de potencia.
  • Aumento del consumo de combustible: la obstrucción del tubo de escape obliga al motor a trabajar más duro para expulsar los gases, lo que se traduce en un mayor consumo de combustible.
  • Emisiones contaminantes: un tubo de escape obstruido puede aumentar las emisiones contaminantes del vehículo, perjudicando el medio ambiente. Y, podría incluso evitar que pases la ITV.
  • Daños en el sistema de escape: pueden provocar la oxidación del mismo y otros componentes del sistema, generando perforaciones o roturas que pueden ser costosas de reparar.

Si no has limpiado tu tubo de escape nunca, deberías prestar atención a ciertas señales o síntomas que pueden indicarte que necesita una limpieza o mantenimiento:

  • Ruidos extraños: un sonido metálico o un zumbido proveniente del tubo de escape puede ser un indicio de obstrucción o daños en el mismo.
  • Aumento del consumo de combustible: si notas un aumento repentino en el consumo de combustible, podría ser una señal de que el tubo de escape está obstruido.
  • Olor a gasolina excesivo: un olor fuerte a gasolina cruda en el escape puede indicar una fuga en el sistema.
  • Pérdida de potencia: si el motor pierde potencia de forma notable, podría ser un síntoma de obstrucción en el tubo de escape.
  • Humo negro: si ves que se emite demasiado humo, puede necesitar una limpieza.
  • Roturas: pueden generarse roturas en el metal del tubo debido a la corrosión o al óxido.

El líquido que ves gotear del tubo de escape de algunos coches es muy probable que sea vapor de agua. Esto es un subproducto normal del proceso de combustión en motores de gasolina o diésel. Durante la combustión, el hidrógeno del combustible reacciona con el oxígeno del aire para producir vapor de agua y dióxido de carbono. El vapor de agua es inicialmente invisible, pero a medida que se enfría en el tubo de escape, se condensa y se convierte en líquido, el cual gotea hacia afuera. No es preocupante. En raros casos el líquido puede ser motivo de preocupación, como cuando gotea líquido de color extraño, que puede ser aceite no quemado, combustible sin quemar por una mezcla demasiado rica, e incluso refrigerante debido a filtraciones.

Cómo limpiar el tubo de escape de tu coche

Botón pasar prueba humos ITV

Una de las primeras dudas que surgen es ¿Con qué frecuencia se debe limpiar el tubo de escape? Para contestar a esto, hay que diferenciar entre el tipo de motor que tenemos y las condiciones de conducción, Por lo general, para motores de gasolina, podrías hacerlo una vez cada dos años, mientras que en motores diésel, debido a que producen más carbonilla, puede que sea necesario hacerlo cada año más o menos. Aunque no existe un tiempo exacto.

Para limpiar el tubo de escape de tu coche de forma correcta en casa, deberías evitar caer en los errores comunes, como:

  • Agua a presión: si bien puede eliminar algunos residuos, el agua a presión puede oxidar el tubo de escape por dentro.
  • Cepillo cilíndrico: raspar con un cepillo puede levantar el galvanizado o el cromado, dejando el metal expuesto a la oxidación.
  • Sosa cáustica: la sosa cáustica es un producto químico peligroso que puede provocar corrosión y quemaduras.

La mejor alternativa es usar un producto profesional para ello, de los que se venden en el mercado o directamente dirigirte a un taller para que un profesional haga una limpieza a fondo para descarbonizar el escape mediante la inyección de hidrógeno.

Cómo limpiar el tubo de escape de tu moto

tubo de escape de moto

En caso de disponer de un vehículo de dos ruedas, como una moto, o de cuatro, como los quads, también puedes hacer una limpieza del tubo de escape para obtener los mismos beneficios citados anteriormente. La frecuencia, nuevamente, no es algo exacto, pero para motores de 2 tiempos, puedes hacer la limpieza cada varios meses, para los motores de cuatro tiempos puedes prolongarlo hasta el año aproximadamente, y para motos deportivas o entornos con mucho polvo, puede que lo tengas que limpiar con mayor frecuencia, sea cual sea el tipo de motor.

Para limpiar el tubo de escape de tu moto en casa, puedes hacerlo de forma externa, usando jabón convencional, agua, y una esponja, además de aire comprimido o cepillos para tratar de eliminar el hollín interno, pero nunca introducir líquidos, jabones o agua en el interior del escape. Por supuesto, siempre hacerlo cuando está frío, ya que esta parte puede alcanzar temperaturas muy elevadas, y podría generar quemaduras u otros incidentes.

Si el tubo tiene roturas, puedes repararlo con los productos citados antes, y si tiene óxido también puedes repararlos con otros productos específicos o usar pinturas que aguanten altas temperaturas para proteger el metal.