El salto de la inflación en enero fue impulsado por una combinación de factores de medición estadística en lugar de una reactivación de la demanda subyacente, ya que muchas tiendas, escuelas y lugares de ocio permanecieron cerrados para detener la propagación del virus. La reversión de una reducción temporal en el IVA alemán, los mayores costos de energía y las interrupciones de la cadena de suministro también jugaron un rol relevante.
El repunte en los rendimientos de los bonos norteamericanos y los datos de empleo más débiles de lo esperado han mantenido al dólar estadounidense relativamente respaldado, entre indicios de una recuperación económica más acelerada, expectativas de estímulos fiscales y una mayor demanda de refugio seguro. Esta operativa podría ser ratificada esta semana por Jerome Powell, quien testifica ante el Congreso el martes y el miércoles, por primera vez desde el inicio del mandato de Joe Biden. Powell se encargará de añadir presión a las negociaciones del paquete de estímulos que actualmente desarrollan los legisladores, advirtiendo de la necesidad de actuar “a lo grande” en el actual contexto de debilidad del mercado laboral. Al margen de este tema, Powell podría ser abordado sobre la rampante evolución del mercado bursátil y los riesgos que supone esta tendencia para la estabilidad del sistema financiero. El foco de esta semana seguirá centrado en la discusión de los estímulos fiscales, con una comparecencia de Janet Yellen hoy, previo a la votación de la Cámara de Representantes más tarde en la semana. La evolución de la campaña de vacunación también ocupará un rol dominante en la dinámica del mercado, después de que un estudio en Israel demostrara que la vacunación masiva permite detener el contagio del virus cerca de un 90%. Estados Unidos se encamina a registrar medio millón de pérdidas por Covid-19, pero el ritmo diario de decesos se ha reducido drásticamente.
La libra esterlina se cotiza prácticamente plana frente al dólar esta mañana a pesar de la relativa apreciación del billete verde frente a un grupo amplio de monedas. Durante el fin de semana, los planes del Primer Ministro del Reino Unido para reabrir la economía dominaron la atención de los medios de comunicación, y muchos promocionan el 8 de marzo como la fecha en que las escuelas iniciarán su actividad normal. Junto con la reapertura de las escuelas, deberán permitirse visitas a hogares de ancianos y picnics al aire libre, aunque la flexibilización más amplia de las medidas se producirá de forma escalonada. Johnson indicó que la estrategia de apertura se dividirá en cuatro etapas en las próximas semanas, basado en la evolución positiva de las cifras de contagio. Boris ofrecerá mayor detalle sobre los planes para reabrir la economía en su declaración al parlamento con la conferencia a la nación programada. Los mercados estarán atentos a los titulares durante todo el día, que probablemente muestren información filtrada en las horas previo al anuncio del primer ministro esta tarde.
El peso mexicano ha registrado pérdidas de cerca de 4% frente al dólar y el euro en la última semana, siendo la moneda de peor desempeño en la cesta de emergentes en ese período. La dinámica alcista de los rendimientos de los bonos del Tesoro en los EE.UU. han soportado esta narrativa de manera amplia. Sin embargo, parte de la debilidad del peso tiene que ver con los cortes de energía registrados en Texas. México es un gran importador de gas natural de Estados Unidos y una reducción de aproximadamente el 75% en los gasoductos de Texas ha dejado al país latinoamericano preocupado por su perspectiva económica, ya que la escasez de energía podría hacer que la recuperación de la pandemia sea mucho más frágil. Algunos expertos pronostican que la reducción de la oferta podría provocar una caída de un punto porcentual en el PIB de México en el primer trimestre de este año, justificado por el hecho de que las cadenas de suministro se verán afectados y las grandes fábricas del norte del país sufrirán mayores interrupciones. El pesimismo sobre el peso ha vuelto a quedar reflejado en los mercados de futuros, donde la posición larga neta de la divisa ha sido recortada por segunda semana consecutiva. Datos de la CFTC indicaron una reducción desde 1483 contratos a 1412 contratos a favor del peso en la última semana. Los inversores estarán sopesando esta situación durante las próximas jornadas, con la publicación de los datos quincenales de inflación el miércoles y la publicación de las actas de Banxico el jueves.
