La hija del magistrado fue contratada por Scarcella, que se hizo cargo de trabajadores de una firma de la mujer del juez
La relación entre el juez Rodolfo Canicoba Corral y el exfuncionario sciolista Guillermo Scarcella no se agotó en los campeonatos de truco. Después de que Viviana Tejada, la esposa del magistrado, se alejara del negocio de envolver valijas en los aeropuertos, Scarcella absorbió a los empleados de su empresa en 2013, según pudo construir LA NACION entre contratos, registros societarios y convenios recopilados durante un año.
Cuando se quedó con el monopolio del mercado que supo compartir con la mujer del juez, Scarcella -entonces titular de Aguas Bonaerenses- ya era un hombre de estrecha confianza de Canicoba Corral. Era habitual que compartieran -allá por 2001- paseos en moto y pileta los fines de semana, lejos de los Tribunales. Pero la relación se extendió, también, al ámbito laboral: Scarcella nombró a Malena Canicoba, una hija del juez, empleada de Aguas Bonaerenses SA.
Tejada (accionista de Ipax SA) y Scarcella se repartieron el mercado de protección de valijas en los aeropuertos locales desde 2011 hasta septiembre de 2013 por una concesión con Aeropuertos Argentina 2000. Envolver valijas con un nylon verde se había convertido en un negocio redituable que aseguraba ganancias mínimas de unos $30 millones por año, informaron fuentes del sector.
Pero ese mercado tuvo un giro en 2013. Wrapping, la nueva firma de la que participaba Scarcella, hizo uso de una cláusula de exclusividad y le pidió a Aeropuertos Argentina 2000 que saque a la empresa de Tejada de todas las terminales aéreas.»Deberán liberar los espacios ocupados por Ipax dentro de los siete días de aceptada esta propuesta», decía la nota interna dirigida a la administradora de los aeropuertos. Y daba cuenta de que Wrapping SA pasaría a ser «el único explotador del servicio» de envolver valijas. A cambio, la empresa de Scarcella debía depositar US$1 millón en una cuenta a designar por Aeropuertos Argentina 2000.
Cuando Ipax fue apartada (retiraron una balanza, carros de embalaje, Posnets y un controlador fiscal), Scarcella creó Baggage SA, una nueva empresa que absorbió toda la estructura de la mujer del juez. «A fin de evitar las consecuencias derivadas de la pérdida de empleo de los dependientes de Ipax, este concesionario envió a Wrapping SA notas mediante las cuales se le ofreció a esta firma el desarrollo de la actividad en exclusividad, como así también que absorban a los empleados de Ipax», indica una nota de Aeropuertos Argentina 2000 remitida ante el Organismo Regulador del Sistema de Aeropuertos (Orsna). La empresa de Tejada -sostiene el documento- «creyó necesario» retener su personal «a través de una tercera empresa denominada Baggage SA».
La esposa del juez ya no estaba en el negocio de las valijas, pero el monopolio quedó en manos de Scarcella. «Sí, lo conozco desde hace mucho tiempo. Él tiene una empresa que siguió trabajando con los aeropuertos, pero no tiene ninguna relación con mi mujer», dijo Canicoba Corral.
La relación entre ellos ya llevaba más de una década. Se habían hecho inseparables desde los 90, cuando Scarcella desembarcó en Comodoro Py. Canicoba Corral, Scarcella y su entonces mujer Patricia Harguindeguy solían visitar a Tejada (que trabajaba en los tribunales porteños con el juez) los fines de semana en la pileta de su edificio en el barrio de Belgrano, según pudo reconstruir LA NACION.
Fueron pareja de truco en la Rody Cup, un campeonato organizado por el hermano del juez Ariel Lijo del que participaban fiscales, jueces, empresarios y políticos. También compartieron la vida académica.
La relación se extendió también al mundo laboral. Malena Canicoba, 38 años, hija del juez, fue nombrada por Scarcella en Aguas Bonaerenses en abril de 2010, según consta en los registro previsionales. La hija del magistrado ya tenía experiencia en el Estado: había trabajado en la Auditoría General de la Nación en 2003, cuando el auditor Javier Fernández, operador kirchnerista en la Justicia, se desempeñaba en esa oficina.
Diseñadora gráfica, Malena Canicoba fue nombrada como empleada efectiva en la Unidad de Relaciones Institucionales de ABSA, oficina que dio de baja la nueva administración. Tenía un salario bruto de $24.000, pudo saber este diario. La hija del juez dejó la empresa en diciembre de 2015, cuando el amigo de la familia se fue del organismo.
Unos años después llegó la devolución de gentilezas. La intervención en la Obra Social de Personal Marítimo nombró al hijastro y al hermano de Scarcella con el aval de Canicoba Corral, el juez que ordenó la intervención del sindicato.
Una relación familiar con cargos públicos
- Viviana Tejada
Esposa del juez
- Compartió un negocio en el aeropuerto con Scarcella
- Malena Canicoba
Hija del juez
- Fue nombrada en ABSA por el funcionario sciolista
- Gregorio Laulhe
Hijastro de Scarcella
- Trabajó en el SOMU, gremio intervenido por el juez
Oscar Scarcella
Hermano del exfuncionario
- También fue designado en la intervención del SOMU
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