En medio del escándalo que abrieron «los cuadernos de la corrupción», el presidente Mauricio Macri le dijo hoy a un grupo de empresarios que «si alguno de ustedes se encuentra con un pedido indebido, acá tienen un Presidente al que acudir y un equipo de Gobierno al que denunciarlo».
Las palabras del jefe de Estado fueron en el marco de un encuentro organizado por la Asociación Empresaria Argentina (AEA) y mientras crecen los hombres de negocio, algunos muy importantes, que piden ser «imputado colaborador» en la investigación por las coimas que se pagaron durante el kirchenrismo y que tiene presos a varios ex funcionarios y empresarios.
«Tenemos que terminar con los comportamientos mafiosos que se tienen que terminar», agregó el mandatario, quien además dejó en claro que «yo no tengo pensado hipotecar mi gobierno ni el futuro de los argentinos para defender a nadie que actúe fuera de la ley».
Durante la charla que reunió a los empresarios más importantes del país, entre ellos Paolo Rocca (Techint), Luis Pagani (Arcor), Alejandro Buhlgheroni (Pan American Energy), Enrique Cristofani (Santander) y Héctor Magnetto, Macri también se refirió a la crisis económica que está viviendo el país. «Estamos enfrentando una tormenta de frente», dijo, recurriendo a una frase utilizada días atrás.
«Mi intención no es negar para nada la agenda de dificultades, especialmente hasta que no lleguemos a un equilibrio fiscal, que nos hace depender del financiamiento externo. Vamos a estar expuestos a vulnerabilidades», agregó.
Asimismo, afirmó que «tenemos el respaldo de las economías más importantes, pero hay cosas que tenemos que hacer nosotros y dejar atrás prácticas arraigadas durante décadas».
