Un ingreso en el que Isabel Pantoja no ha contado con nadie: aislada de sus hijos y su sobrina
> La relación entra madre e hijo sigue tensa. Desde que el joven se sentara en Cantora, la herencia envenenada y acusara a su madre de haber hecho tejemanejes con su herencia junto a su tío Agustín, madre e hijo no se hablan. Ni siquiera en una situación así, Isabel ha querido coger el teléfono y pedirle apoyo a su ‘pequeño del alma’.
Por terceras personas, como el colaborador de Sálvame, Kiko Hernández, se ha tenido que enterar el Dj del estado de salud de su abuela… E imaginamos que también, por los medios, se habrá enterado de que doña Ana ahora mismo se encuentra de nuevo en Cantora, la finca por la que los dos se han dejado de hablar. Y claro, si nadie le ha llamado para saber cómo se encontraba en el hospital, mucho menos ahora. ¿Le ocurrirá lo mismo a Anabel Pantoja?
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