Los líderes de la extrema derecha europea perciben a Quim Torra y a Carles Puigdemont como sus homólogos con barretina.
La Liga Norte, liderada por el ultraderechista Matteo Salvini, no duda en dar soporte al partido secesionista catalán tanto dentro de Italia como en Cataluña.
Son habituales los contactos entre el xenófobo Salvini con su semejante catalán, Quim Torra. Ambos comparten odio y visión excluyente de la sociedad y la política.
De la extrema izquierda a la ultraderecha
“Yo era comunista. Iba por ahí con una chapita del Che Guevara y con otra de la bandera del País Vasco, por solidaridad con los independentistas”, llegó a afirmar Salvini. Pero no tardó en cambiar de bando como el que muda su ropa interior.
Matteo Salvini pasó fugazmente por la extrema izquierda para unirse a las juventudes de la formación de ultraderecha Liga Norte, instigado por sus aspiraciones separatistas entre el norte y el sur de Italia y eslóganes como “Roma nos roba” que rápidamente compartieron los nacionalistas catalanes.
Pero no sólo la extrema derecha italiana participa de los postulados del PdCat. Bernd Lucke, fundador y primer presidente de Alternativa para Alemania, el partido xenófobo más nostálgico de Hitler aplaude a Puigdemont y se deshace en halagos hacia Torra. No en vano, el expresidente fugado catalán fue protegido por la extrema derecha alemana en su huida de la justicia.
En Bélgica, Carles Puigdemont es protegido por la extrema derecha flamenca. No sólo lo hace desde el Gobierno o en los tribunales sino también en su vida cotidiana.
Tanto en Dinamarca como en Suiza, como en Finlandia, donde Puigdemont realiza campañas en favor de la independencia y del odio hacia España, son entidades de la extrema derecha las que le proporcionan infraestructura, seguridad y logística.
Salvini quiere mediar entre Rusia y Cataluña
No es ningún secreto las excelentes relaciones que Vladimir Putin mantiene con la extrema derecha europea. Muchos analistas políticos coinciden en afirmar que el líder ruso pretende liderar la coalición ultraderechista europea y que sirva de contrapeso a la corriente conservadora norteamericana.
Marine Le Pen, Salvini y otros líderes xenófobos mantienen afinidades ideológicas con Putin además de compartir intereses y concepciones comunes de lo que debe ser Europa. El supremacismo, la soberanía nacional, el nacionalismo, el autoritarismo, el conservadurismo, la xenofóbia y el odio al discrepante son elementos que comparte Putin, la extrema derecha europea y el PdCat.
La Guardia Civil, la Policía Nacional así como los servicios secretos alemanes ya detectaron el apoyo ruso al independentismo catalán y, especialmente, en la consulta promovida por la Generalitat el 1-O. El presidente de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, Hans-Georg Massen durante un simposio organizado en Berlín dejó claro que:
“Un intercambio de información con colegas europeos evidencia que ellos también viven experiencias similares, que en particular Rusia está tratando de utilizar operaciones secretas para influenciar en la opinión pública a través de organizaciones extremistas y radicales”. Massen apuntó además que: “En el caso de los separatistas catalanes, según se ha informado, apoyando su posición a través de actividades de propaganda”.
El xenófobo Torra procura ocultar las conexiones con sus homólogos ultraderechistas europeos
Así la cosas, Matteo Salvini ya ha propuesto a Vladirmir Putin que Rusia impulse sanciones económicas a la Unión Europea y en particular a España hasta que los políticos presos catalanes no sean liberados. Además, el lider xenófobo italiano se ha autoproclamado «mediador» entre las autoridades rusas y catalanas para ayudarles en su objetivo independentista.
Esta actividad frenética que desarrolla la extrema derecha europea contrasta con la discrección que mantienen los independentistas catalanes en Cataluña. El PdCat no quiere enturbiar sus débiles relaciones con la CUP o Esquerra Republicana. Por ello, tanto Quim Torra como Carles Puigdemont ocultan, niegan y procuran disimular las evidentes conexiones del independentismo catalán con la extrema derecha.
Lo cierto es que, tanto Vladimir Putin como la ultraderecha europea coinciden en dar soporte, infraestructura, ayuda en inteligencia, logística y tecnológica al actual presidente de la Generalitat Quim Torra en su política de enfrentamiento con el Estado español. Unos acuerdos secretos que aumentan y se consolidan día a día.
