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Tracción delantera: ventajas, desventajas y excepciones

Tracción delantera

No es casualidad que los coches de tracción delantera sean los más frecuentes. Las ventajas que tienen sobre los de propulsión se encuentran tanto en su proceso de fabricación, como en las facilidades de manejo que ofrecen a los conductores. Por ese motivo sus desventajas no pesan lo suficiente como para evitar que hayan proliferado.

Sin embargo, no todo son ventajas en este tipo de coches. Por eso, todavía se encuentran modelos con las ruedas traseras motrices, ya sea por las cualidades dinámicas que buscan sus creadores o por la tradición de la marca.

Ventajas de la tracción delantera

Dado que no todas las virtudes de estos coches son disfrutables por el usuario, vamos a diferenciar entre las ventajas en su fabricación y las ventajas para el conductor o los ocupantes.

Los coches de tracción delantera son más fáciles de fabricar

Ventajas en su fabricación

Podemos decir que los vehículos con tracción delantera son más económicos y sencillos de fabricar, ya que carecen del árbol de la transmisión. Un elemento que no solo es una simple barra giratoria que transmite la fuerza del motor a las ruedas traseras, sino que está lleno de componentes imprescindibles como los cardanes, las juntas elásticas, varios soportes y manguitos deslizantes.

Esto es así, porque los vehículos con tracción delantera tienen el motor y las ruedas motrices en el mismo eje. Así que la transmisión solo requiere del embrague, la caja de cambios, el diferencial delantero, dos palieres y las juntas homocinéticas.

Los coches con tracción delantera tienen la ventaja de que son más fáciles de controlar

Ventajas para el conductor y los ocupantes

  • La primera y más conocida es la de que son más fáciles de controlar en caso de derrape. Sobre todo porque en la gran mayoría de los casos tienen al subviraje, que es más fácil de corregir que el sobreviraje al que tienen los vehículos con propulsión. En el caso de los delantera, simplemente hay que dejar de acelerar o frenar un poco para entrar en la curva. En los trasera, se requiere contravolantear que es mucho más difícil.
  • Al tener menos componentes en su transmisión, los coches con tracción delantera suelen consumir menos. Primero, porque tiene menos elementos internos que mover y, segundo, porque pesan menos que los de tracción trasera o total.
  • Además, en condiciones climatológicas adversas como la nieve, poseen una mejor tracción que los de propulsión. El peso del motor se encuentra en el eje de las ruedas motrices así que favorece que los neumáticos consigan agarre. En el siguiente vídeo se explica con detalle:
  • Los vehículos de tracción delantera tienen menos partes móviles, por lo que su mantenimiento puede resultar bastante más económico que los vehículos con tracción trasera.
    Los manguitos, soportes, juntas y cardanes de los árboles de transmisión son un extra de elementos que hay que revisar porque pueden agarrotarse. Por eso, las revisiones de los coches con tracción trasera son algo más laboriosas que la de los coches de tracción delantera. Es más, si algo se avería, en muchas ocasiones hay que cambiar varios elementos juntos para evitar problemas. Lo que supone un gasto en reparaciones mayor.
  • Por último, también podemos decir que tienen un mayor espacio interior. Carecen del árbol de la transmisión, algo que disfrutarán los ocupantes en el habitáculo por no requerir de un túnel central voluminoso. La principal beneficiada es la plaza central trasera, que en los coches de tracción delantera suele tener mejor espacio para los pies.
    Este mayor espacio también se suele notar en el maletero, porque los coches con tracción delantera tienen el diferencial en el eje delantero. Esta pieza suele ser lo suficientemente voluminosa como para restar mucho espacio de carga cuando tiene que montarse en el eje trasero. Cosa que pasa en los coches de propulsión y en los de tracción total.

Los coches con tracción delantera tienen la ventaja de tener más espacio

Excepciones de las ventajas de la tracción delantera

  • La primera matización es que los controles de tracción y de estabilidad eliminan la ventaja de que los coches con tracción delantera sean más fáciles de controlar. Tanto es así, que los coches con tracción trasera que no tengan estos sistemas desconectables o parcialmente desconectables no ofrecen ni un atisbo de la diversión que se supone que tienen.
  • La segunda es que los coches con tracción delantera pero motor trasero sí requieren de un árbol de transmisión. Así que, ni las ventajas de fabricación, ni de reducción de peso o componentes se pueden aplicar a ellos. Sin embargo, este tipo de vehículos son muy raros, porque apenas han existido unos pocos a lo largo de la historia del automóvil y siempre en la categoría de prototipos. Buenos ejemplos de ellos son: el Maroon Car, el portador de ametralladoras Howie y el coche Dymaxion.
  • La tercera matización se aplica más bien al compararlos con los coches con tracción trasera y motor trasero. Una configuración que se equipara a los de tracción delantera en la sencillez y ligereza de la transmisión.
  • La cuarta viene de la mano de los coches eléctricos. La mayoría de ellos no requieren de muchos de elementos de transmisión, incluido el árbol de transmisión. Sus motores son muchos más pequeños y ya producen un movimiento giratorio, así que pueden ir ubicados directamente en el eje que vayan a mover. Por lo tanto, un coche eléctrico de tracción delantera no tiene que ser más barato o sencillo de fabricar que uno de propulsión (mal llamados de tracción trasera).

Los coches eléctricos no tienen las mismas desventajas

Desventajas de los coches con tracción delantera

Sin embargo, los vehículos de tracción delantera también tienen sus desventajas, entre las que podemos destacar:

  • Al tener el motor y toda la transmisión en el eje delantero, el reparto de pesos es peor que en los coches de propulsión. Normalmente ronda el 60% en el eje delantero y el 40% en el eje trasero. Esto supone que su comportamiento dinámico es peor en condiciones muy exigentes y provoca el antes mencionado subviraje.
  • Debido a que las ruedas delanteras son las encargadas de la motricidad y del giro, el eje delantero acumula muchos componentes. Esto limita las capacidades de la dirección y por lo tanto suelen tener menor maniobrabilidad. Es decir, que los tracción delantera giran algo menos y resultará un poco más complicado hacer giros muy cerrados. Un buen ejemplo de ello se aprecia en el BMW Serie 2 Coupé y Gran Coupé (2022 y 2020). El primero es propulsión y su diámetro de giro entre paredes es de 11,1 metros. En cambio, el segundo es tracción delantera y su diámetro de giro es de 11,4 metros.
  • Como en aceleraciones fuertes se tiende a levantar el morro del coche, los coches con tracción delantera pierden agarre. Circunstancia que favorece a los coches de propulsión porque se aprieta más el eje trasero, que es precisamente con el que empujan. Por este motivo, no encontrarás coches muy potentes de tracción delantera (de fabricación en serie). A día de hoy, el Honda Civic Type R es el más potente con sus 320 CV. Más allá de eso solo hay coches con tracción trasera, total o 4×4.
    Además, la aceleración desde parado de los coches con tracción delantera es peor precisamente por esta pérdida de agarre. Aunque las ayudas electrónicas como el Launch Control, pueden reducir (y no eliminar) esta diferencia con los de propulsión o tracción total. Un modelos que sirve de ejemplo de ello es el Hyundai i30 N, que es tracción delantera y tiene este sistema incluso con cambio manual.

Los coches con tracción delantera tienen desventajas como un menor agarre en aceleraciones fuertes

Excepciones de las desventajas de la tracción delantera

La desventaja del peor reparto de pesos no es aplicable a los coches eléctricos más avanzados con tracción delantera. Sus motores son mucho más compactos y ligeros que los motores de combustión tradicionales, así que el eje en el que estén montados no afecta tanto al reparto de pesos.

En estos coches, es la batería la que supone la mayor parte del peso del tren de potencia y suele estar ubicada en el suelo del vehículo, donde ocupan todo el espacio entre ambos ejes. Por eso, el reparto de pesos en estos coches suele ser más equilibrado.

Esto no es aplicable a cualquier coche eléctrico. Los que mantienen la arquitectura de los coches con motor de combustión sí pueden tener las desventajas de los coches con tracción delantera, ya que no tienen por qué contar con la arquitectura aquí descrita.

El Toyota bZ4X es un coche eléctrico con tracción delantera y la desventaja del reparto de pesos no es igualmente aplicable a él

En definitiva

Se puede decir que existen tres grandes grupos de vehículos. Tenemos los coches con tracción delantera, con propulsión trasera y los vehículos con tracción a las cuatro ruedas.

Los vehículos con tracción son los que tienen las ruedas motrices en el eje delantero. En cambio, los vehículos de propulsión tienen las ruedas motrices en el eje trasero. Por último, los vehículos con tracción a las cuatro ruedas tienen las cuatro ruedas motrices, bien de forma permanente o conectable.

Hoy en día, en nuestro país una gran parte de los vehículos que se venden son de tracción delantera como, por ejemplo, Citroën, Peugeot, Fiat… Por el contrario, las marcas clásicas de propulsión son BMW, Mercedes y muchos vehículos deportivos. Aunque algunas de ellas han ido añadiendo vehículos con tracción delantera a su repertorio.

¿Cuál de los dos sistemas es mejor? Cada uno tiene sus propias características que lo hacen mejor o peor dependiendo de la persona que lo vaya a conducir y dependiendo de lo que busque realmente en su coche.

Lo que sí podemos decir son las ventajas de cada uno de estos sistemas para que luego, cada usuario, escoja la opción que mejor se adapte a sus necesidades.